domingo, 4 de abril de 2010

¡FELICES PASCUAS!

  ¡Felices Pascuas para todos!. Y ¡gracias por siempre acompañarnos!









sábado, 3 de abril de 2010

¿Tenés tiempo para Dios?

Mañana en la mañana abriré tu corazón le explicaba el cirujano a un niño.
Y el niño interrumpió:

-¿Usted encontrará a Jesús allí…?
El cirujano se quedó mirándole, y continuó: - Cortaré una pared de tu corazón para ver el daño completo.

-Pero cuando abra mi corazón, ¿encontrará a Jesús ahí…?, volvió a interrumpir el niño.
El cirujano se volvió hacia los padres, quienes estaban sentados tranquilamente.
Cuando haya visto todo el daño allí, planearemos lo que sigue, ya con tu corazón abierto.

-Pero, ¿usted encontrará a Jesús en mi corazón? La Biblia bien claro dice que Él vive allí. Las alabanzas todas dicen que Él vive allí....
¡Entonces usted lo encontrará en mi corazón!
El cirujano pensó que era suficiente y le explicó:
Te diré que encontraré en tu corazón:
Encontraré un músculo dañado, baja respuesta de glóbulos rojos, y debilidad en las paredes y vasos. Y aparte me daré cuenta si te podemos ayudar o no.
-¿Pero encontrará a Jesús allí también…? Es su hogar, Él vive allí, siempre está conmigo.
El cirujano no toleró más los insistentes comentarios y se fue.

Enseguida se sentó en su oficina y procedió a grabar sus estudios previos a la cirugía:

“aorta dañada, vena pulmonar deteriorada, degeneración muscular cardiaca masiva. Sin posibilidades de trasplante, difícilmente curable. Terapia: analgésicos y reposo absoluto.
Pronóstico: tomó una pausa y en tono triste dijo: muerte dentro del primer año. Entonces detuvo la grabadora. Pero, tengo algo más que decir: ¿Por qué?
Pregunto en voz alta ¿Por qué le hiciste esto a él? Tú lo pusiste aquí, tú lo pusiste en este dolor y lo has sentenciado a una muerte temprana. ¿Por qué?

De pronto, Dios, nuestro Señor le contestó:

"El niño, mi oveja, ya no pertenecerá a tu rebaño porque él es parte del mío y conmigo estará toda la eternidad, aquí en el cielo, en mi rebaño sagrado- Ya no tendrá ningún dolor, será confortado de una manera inimaginable para ti o para cualquiera. Sus padres un día se unirán con él, conocerán la paz y la armonía juntos, en mi reino y mi rebaño sagrado continuará creciendo.

El cirujano empezó a llorar terriblemente, pero sintió aun más rencor por las razones. Y replicó:

Tú creaste a este muchacho, y también su corazón ¿Para qué? ¿Para que muera dentro de unos meses?

El Señor le respondió:

“Porque es tiempo de que regrese a su rebaño, su tarea en la tierra ya la cumplió.
Hace unos años envié una oveja mía con dones de doctor para que ayudara a sus hermanos, pero con tanta ciencia se olvidó de su Creador.
Así que envié a mi otra oveja, el niño enfermo, no para perderlo sino para que regresara a mí aquella oveja perdida desde hace tanto tiempo.

El cirujano lloró y lloró inconsolablemente.
Días después, luego de la cirugía, el doctor se sentó a un lado de la cama del niño; mientras que sus padres lo hicieron frente al médico.

El niño despertó y murmurando rápidamente preguntó:

-¿Abrió mi corazón?

Si - dijo el cirujano-

-¿Qué encontró? preguntó el niño

Tenías razón, encontré allí a Jesús.

Dios tiene muchas maneras y formas diferentes para que tú regreses a su lado.

Déjame contarte, asegúrate de leer todo esto hasta el final.

Asunto: Leer solamente si tienes tiempo para Dios.
Dios, cuando recibí este mensaje pensé... Yo no tengo tiempo para esto... y realmente hacerlo es inadecuado en horas de trabajo. Luego, me di cuenta que el pensar así es exactamente lo que ha causado muchos de los problemas en nuestro mundo actual.
Tratamos de tener a Dios en la iglesia el domingo por la mañana. A veces quizás el Domingo por la noche... y, en eventos poco agraciado de algún servicio a media semana.
Eso sí, nos gusta tenerlo cerca en la enfermedad... y sobretodo en los funerales. Pero, no tenemos tiempo, o lugar para ÉL en horas de trabajo o en nuestro tiempo libre... Porque esa es la parte de nuestras vidas en las que pensamos: “Podemos y debemos manejar solos”.

Quiera Dios perdonarme por haber pensado que hay un tiempo o lugar donde ÉL no sea el PRIMERO en mi vida.
Debemos siempre tener tiempo para recordar TODO lo que ÉL ha hecho por nosotros.
Jesús dijo. “Si tu te avergüenzas de mi, yo me avergonzaré de ti delante de mi Padre”.
Entonces me arrodillé para orar pero no por mucho tiempo, tenía mucho por hacer. Mi alma pudo entonces descansar plácidamente.
En todo el día no tuve tiempo de lanzar una palabra de aliento a nadie, ni de hablar de Jesús a mis amigos;

No hay tiempo, no hay tiempo. Hay mucho qué hacer. . .
Ese era mi sollozo constante. No hay tiempo para darle aliento aunque más no sea una sonrisa, a las almas en necesidad, sino hasta la última hora, la hora de morir.
Me pare frente al Señor, y permanecí cabizbajo, ya que en SUS manos sostenía un libro; el libro de la vida.
Dios echó una mirada a su libro y dijo: “No puedo encontrar tu nombre. Una vez estuve a punto de anotarlo, pero nunca encontré el tiempo”
¿Por qué es tan aburrido leer una revista cristiana, y tan divertido hojear una con contenido repugnante? ¿Por qué es tan fácil borrar mensajes de Dios y reenviar mensajes sucios? ¿Por qué las iglesias y templos se vuelven más pequeños mientras los bares y discotecas crecen en tamaño?

De todos los regalos que podamos recibir, una oración es el mejor.

No cuesta nada y trae maravillosas recompensas, Dios te bendice.

¡Que Dios te guarde y te bendiga!. Si esta frase no te eriza, nada lo hará.

NOTAS:

No es curioso lo fácil que es despreciar a Dios y luego preguntarse por qué el mundo  está tan mal.

No es curioso cómo alguien puede decir 'Creo en Dios' y seguir a Satanás, (quien a propósito, también cree en Dios).

No es curioso que envíes miles de mensajes con chistes , a veces hasta obscenos a través del correo electrónico, los cuales se riegan como pólvora, pero cuando empiezas a enviar mensajes que se refieren a El Señor, la gente lo piensa dos veces antes de leerlos hasta el final y mucho menos de compartirlos?

No es curioso cómo la gente puede estar más preocupada de lo que los demás piensen de ellos, de que lo que piense Dios.